COMITE DE SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL

24º período de sesiones

Roma, 2-5 de junio de 1998

EVALUACION DE LA SITUACION DE LA SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL



I. INTRODUCCION

1. Respondiendo a varias solicitudes del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA), en este documento se presenta un primer intento de ampliar la evaluación de la situación de la seguridad alimentaria mundial ofreciendo una mejor cobertura de los alimentos básicos no cereales y del estado de la seguridad alimentaria de las personas y en los hogares.

2. En el Capítulo II del documento, se examinan la información y tendencias recientes con respecto a determinados indicadores de distintos grupos de países en desarrollo, clasificada según el porcentaje estimado de personas desnutridas en 1990-92 (período base utilizado por la Cumbre Mundial sobre la Alimentación). Se ofrece información sobre la evolución de la situación de la seguridad alimentaria hasta 1995 inclusive (último año del que se dispone de información con respecto a la mayoría de los indicadores) y se señalan a la atención algunas cuestiones que puede ser interesante investigar más en profundidad.

3. En el Capítulo III se presenta la evaluación de la situación actual de la seguridad alimentaria mundial en 1996-97, centrando la atención principalmente en las novedades relacionadas con la producción y comercialización de alimentos básicos durante el período correspondiente. Se destacan también acontecimientos notables de 1998 que han tenido o se espera que tengan repercusiones importantes en la situación de la seguridad alimentaria en 1997-98 y más adelante.

II. PRESENTACION DE DATOS RECIENTES Y TENDENCIALES RESPECTO DE DETERMINADOS INDICADORES DEL ESTADO DE LA SEGURIDAD ALIMENTARIA DE LAS PERSONAS Y EN LOS HOGARES EN LOS
PAISES EN DESARROLLO

4. En espera del resultado de la labor del Grupo de Trabajo Interinstitucional sobre Sistemas de Información y Cartografía sobre la Inseguridad Alimentaria y la Vulnerabilidad (GTI-SICIAV), en forma de una serie de indicadores adoptada de común acuerdo, la Secretaría de la FAO presenta al CSA alguna información sobre unos pocos indicadores fácilmente disponibles que se consideran pertinentes para seguir los progresos en la reducción del número de personas desnutridas y la consecución de la seguridad alimentaria para todos. Los resultados que se presentan deberán considerarse como un informe intermedio sobre los trabajos en curso. Aunque, a efectos prácticos, se mantiene el índice agregado de seguridad alimentaria en el hogar, el GTI-SICIAV está examinando actualmente su pertinencia para las futuras actividades de vigilancia del CSA.

5. Al organizar los datos [ Los datos se refieren a 98 países en desarrollo, que incluyen el 96 por ciento de la población de los países en desarrollo.] para su presentación en este documento, se decidió presentar dos tipos de datos: datos sobre el estado (Cuadro 1) que caracterizan la situación actual (en general eran de hacía dos años en el momento de la evaluación) y datos tendenciales (Cuadro 2) que indican la dirección del cambio. Se hacen breves comentarios sobre cada uno de estos indicadores y se dan ideas para interpretar algunos aspectos de la situación y tendencias en la seguridad alimentaria en los hogares en los países con distintos niveles de prevalencia de la desnutrición.

6. Los tres primeros indicadores recuerdan la proporción de personas desnutridas que, junto con las cifras de la población, permite estimar la cifra de las personas desnutridas en 1990-92. Los 98 [ No siempre se dispone para los 98 países de los datos relativos a otros indicadores tratados en este documento.] países en desarrollo para los que se dispone de esta estimación han sido agrupados en seis clases con proporciones de personas desnutridas decrecientes de más del 50 por ciento en la Clase Uno a menos del 10 por ciento en la Clase Seis.

7. PNB per cápita: Las Clases con una elevada proporción de personas desnutridas están integradas fundamentalmente por países de bajos ingresos: de los 37 países incluidos en las Clases de Uno a Tres, sólo tres se hallan por encima del nivel de bajos ingresos de 765 dólares EE.UU. al año, en 1995: en cambio, de los 31 países de las Clases Cinco a Seis, sólo tres se hallan por debajo del nivel de bajos ingresos. No obstante, además de las excepciones mencionadas, cada Clase contiene países distribuidos en una gama muy amplia de promedios nacionales del PNB per cápita. La Clase Cuatro es la más heterogénea, ya que incluye varios países con menos de 300 dólares de PNB per cápita y varios otros con más de 3 000 dólares al año. Esto se debe a la importancia que la distribución de los ingresos, el fácil acceso a los alimentos y otros factores no relacionados con los ingresos puede tener en la situación de inseguridad alimentaria en un país, independiente del promedio de los ingresos.

8. Una característica estructural pertinente para las políticas de seguridad alimentaria es la dependencia de la economía con respecto a la agricultura, que se mide en el cuadro mediante la proporción de población rural y la parte de la agricultura en el Producto Interno Bruto (PIB). Dicha dependencia es en general muy elevada, en particular en lo relativo a las Clases con una prevalencia elevada de desnutrición. Las Clases de la Uno a la Cinco contienen países en los que el 70 por ciento o más de la población es rural, mientras que los países con una población rural menor figuran frecuentemente en las Clases de menor proporción de personas desnutridas. La misma observación vale para la parte de la agricultura en el PIB. Sin embargo, los datos demuestran que la relación entre la prevalencia de la desnutrición y el carácter agrícola/rural de una economía es compleja. En todas las Clases, predomina una gama bastante amplia de grados de dependencia de la agricultura, en cuanto se mide por ambos indicadores, si bien los extremos superior e inferior de la gama se reducen a medida que disminuye la proporción de personas desnutridas.

9. El indicador del crecimiento del PNB per cápita durante 1985-95 muestra un aumento positivo en 40 países, una variación insignificante en 26 y una reducción en 21 casos. Este indicador, que muestra las condiciones económicas predominantes en el período precedente a la situación evaluada, se relaciona claramente con la clasificación del país basada en la proporción de personas desnutridas en 1990-92. Todos los países de la Clase Uno tuvieron un crecimiento insignificante o negativo de los ingresos per cápita en el decenio estudiado; dos tercios de los países de las Clases Dos y Tres tuvieron un crecimiento insignificante o negativo; en la Clase Cuatro, la mitad de los países tuvieron ya un crecimiento positivo; y las Clases Cinco y Seis contienen predominantemente países con crecimiento del PNB positivo. La hipótesis de que una proporción elevada de personas desnutridas pueda ser por sí misma un impedimento para el desarrollo económico puede apoyarse con esta observación y merece la pena seguir investigando.

10. El superávit neto del comercio agrícola es importante principalmente para los países con mayor dependencia de la agricultura. En general, dos de cada cinco de los países examinados registraron un comercio agrícola aproximadamente equilibrado en el período 1985-95; uno de cada cinco tuvo un superávit y dos de cada cinco, un déficit. Estas proporciones no cambian sensiblemente en relación con las clases de países arriba consideradas.

11. La dependencia de las importaciones de alimentos se mide como importaciones netas de alimentos en términos de calorías per cápita al día. Sólo una cuarta parte de los países tienen o superávit o aproximadamente un equilibrio. El equilibrio se define como un superávit o déficit de menos de 100 calorías por día, es decir, el 5 por ciento o menos de la disponibilidad de alimentos per cápita. En cuanto a los países con déficit de alimentos, que son la gran mayoría, vale la pena observar que se encuentra una prevalencia mayor de altos déficit de alimentos en las clases con proporciones más bajas de personas desnutridas; en efecto, las grandes importaciones de alimentos están relacionadas en general con un PNB y poder adquisitivo per cápita más altos.

12. La producción de alimentos básicos ha ido creciendo en 1985-95 en los países de todas las Clases y ha disminuido en menos de la cuarta parte de ellos. Sin embargo, las tendencias en la producción de alimentos básicos no muestran ninguna relación sólida con las Clases de desnutrición. La mayoría de los países de las Clases Uno a Tres, donde mayor es la prevalencia de la desnutrición, han incrementado su producción de alimentos básicos durante el decenio considerado; es interesante recordar que este mismo grupo de países experimentó en general un crecimiento insignificante o negativo del PNB per cápita durante el mismo período.

13. Se ha examinado también la inflación de los precios de los alimentos, medida como la diferencia entre las variaciones de los precios de los alimentos y la inflación general, en el período 1985-95. Muestra que no ha habido ninguna tendencia general en los precios reales internos de los alimentos, registrándose en muy pocos casos tendencias positivas o negativas en dichos precios reales. Es de señalar, no obstante, que el análisis de las tendencias oculta las fluctuaciones de los precios a corto plazo y no proporciona una base para entender las dificultades derivadas de la inestabilidad de los precios.

14. La disponibilidad de alimentos en 1993-95 es una estimación del suministro alimentario medio, medida en calorías per cápita al día. En general la disponibilidad de alimentos durante 1993-95 guarda una relación estrecha con la Clase de desnutrición en 1990-92, pero son importantes los casos de divergencia ya que reflejan esencialmente el efecto de las diferencias en el acceso a los alimentos, o de los cambios registrados entre 1990-92 y 1993-95. Esto último se ve en el cambio en la disponibilidad de alimentos per cápita, medido como relación de 1993-95 a 1990-92. En 1993-95, 58 países tenían un suministro alimentario medio más alto que en 1990-92 (de los cuales cinco habían conseguido aumentos superiores al 10 por ciento, 32 entre el 2 y el 10 por ciento, y 21 menos del 2 por ciento); 10 países no habían registrado cambio alguno; y 30 países tenían un suministro alimentario medio inferior al de 1990-92 (8 de los cuales, un 2 por ciento menos; 17, entre el 2 y el 10 por ciento menos; y 5, más del 10 por ciento menos). Los casos de una disponibilidad de alimentos mayor son relativamente más frecuentes en las Clases Cuatro a Seis (dos tercios de los países tienen mayor disponibilidad) y en la Clase Dos (ocho países de diez) que en las Clases Uno y Tres (sólo siete países de 27 tienen mayor disponibilidad de alimentos).

15. Este breve examen de una serie de indicadores estructurales y tendenciales en relación con la prevalencia de la desnutrición puede dar solamente ideas parciales sobre la situación de la seguridad alimentaria en el hogar. Muestra la gran diversidad de condiciones en las que pueden evolucionar situaciones más o menos graves de inseguridad alimentaria. Indica asimismo algunas direcciones para seguir la investigación acerca de las relaciones entre la pobreza y el desarrollo económico, y sobre todo, acerca de los mecanismos a causa de los cuales la desnutrición crónica puede llegar a ser un obstáculo económico a nivel individual y para el sistema económico en su conjunto, en los casos en que la satisfacción de las necesidades básicas llega a ser la principal obligación para grandes sectores de la población . Por último, subraya la necesidad de seguir elaborando indicadores más específicos de la inseguridad alimentaria y la vulnerabilidad, así como de sus determinantes, tal como se está haciendo en el marco interinstitucional para el desarrollo del SICIAV.

III. SITUACION ACTUAL Y PERSPECTIVAS A CORTO PLAZO DE LA ALIMENTACION EN EL MUNDO

A. PERSPECTIVAS DE LA ALIMENTACION EN EL MUNDO

Cereales

16. Las perspectivas de la alimentación en el mundo que se presentan a continuación se refieren a los alimentos básicos (cereales, raíces y tubérculos), grasas y aceites, carne y productos lácteos. En el Cuadro 3 se muestran datos resumidos sobre la producción, utilización, comercio y cambios en las existencias de estos productos en el mundo.

17. La producción mundial de cereales en 1997, estimada en 1 908 millones de toneladas, fue superior a la tendencia a largo plazo por segundo año consecutivo, si bien el crecimiento fue menor que el de la pronunciada recuperación de la campaña precedente. Los niveles alcanzados por las cosechas de trigo y arroz hicieron que la cosecha de cereales de 1997 fuera superior, pero disminuyó notablemente la producción de cereales secundarios. Se prevé que la utilización de cereales en 1997/98 ascenderá a 1 889 millones de toneladas, nivel superior a la tendencia a largo plazo, pero inferior al de la producción.

18. Las perspectivas iniciales con respecto a la producción de 1998 son variadas. Las condiciones de los cultivos eran normales durante el primer trimestre del año, pero la superficie sembrada con trigo de invierno en los Estados Unidos y la Comunidad de Estados Independientes (CEI) fue menor que el año pasado y se prevé que disminuirá la producción de trigo de China. Al mismo tiempo, los daños que el fenómeno El Niño ha causado a la cosecha de cereales secundarios en el Africa Austral han sido menores de lo que se temía y se espera también una recuperación en el Africa del Norte. Es probable que la producción arrocera de 1998 sea algo menor a causa del mal tiempo, en parte atribuible al fenómeno El Niño que retrasó las siembras en algunos países del Hemisferio Sur y en torno a la franja ecuatorial. Además, se prevé que en algunos países del Hemisferio Norte se dedicará al arroz una superficie menor debido a la limitación de los suministros de agua para el riego.

19. El pronóstico de la FAO relativo a las existencias de cereales al final de los años agrícolas que terminan en 1998 arroja actualmente la cifra de 302 millones de toneladas, que representa un 3,4 por ciento más que los niveles de apertura. El aumento previsto se debe en su totalidad a que los remanentes de trigo serán probablemente mayores de lo previsto; los de cereales secundarios se mantendrán prácticamente inalterados y los de arroz disminuirán alrededor del 5 por ciento. Aunque se pronostica que aumentarán las reservas de trigo por segundo año consecutivo, sobre todo en los países importadores, su nivel total será notablemente inferior a los de comienzos de los años 90. Las existencias de cereales secundarios, aunque son inferiores a las de años anteriores, han ido aumentando en los últimos meses debido a que ha sido limitada la utilización interna en varios países exportadores y a que se ha debilitado la demanda de importación en Asia. Según pronósticos provisionales, las existencias mundiales de arroz a final de las campañas de mercadeo de 1998 habrán disminuido por debajo de sus niveles de apertura, ya que se prevé que la producción de 1998 será menor en algunos países y se supone que continuará creciendo el consumo.

20. El pronóstico del volumen del comercio mundial de cereales en 1997/98 es de 202 millones de toneladas, unos 2 millones o el 0,7 por ciento más que el volumen reducido del año pasado, lo que se debe en su totalidad al incremento del comercio de arroz que, según pronósticos actuales, ascenderá a más de 22 millones de toneladas en 1998, frente a 18,4 millones en 1997. La razón de este incremento es que las existencias iniciales eran menores en varios de los principales países importadores, como Indonesia [ Una misión FAO/PMA de evaluación de los cultivos y suministros alimentarios, que visitó Indonesia a fines de marzo de 1998, estimó las necesidades de importación de arroz en 3,5 millones de toneladas, aún suponiendo que era normal la cosecha secundaria de arroz que se recogerá en agosto de este año. Estas cifras representarían un aumento del 16 por ciento en el comercio mundial del arroz.] , Filipinas y Brasil, y se prevé que disminuirán los rendimientos en algunos países productores del Hemisferio Sur. Las importaciones mundiales de cereales secundarios en 1997/98 se pronostican en 88 millones de toneladas, cifra ligeramente inferior a la del año pasado, como consecuencia de la reducción del pronóstico de las compras de cereales secundarios que efectuarán algunos países de Asia, en los que la demanda se ha debilitado a causa de la crisis financiera asiática. El pronóstico relativo a las importaciones mundiales de trigo en 1997/98 es de 92,5 millones de toneladas, 1,2 millones menos que en la pasada campaña, lo que se debe a la reducción de las importaciones de China y varios países de Europa oriental.

21. Los precios internacionales de exportación de los principales cereales, excepto el arroz, se han debilitado mucho desde octubre de 1997. Aunque la mejora de las perspectivas de la oferta mundial explica el descenso de los precios del trigo en los últimos meses, los efectos de la crisis financiera de Asia han ejercido una presión a la baja de los precios internacionales del maíz. En cambio, los precios del arroz han recibido apoyo de la fuerte demanda de importación en Asia debido a la reducción de la producción interna en varios de los principales países importadores. Por ello, se prevé que en 1998 los precios internacionales del arroz se mantendrán más firmes que en 1997.

Raíces y tubérculos

22. La producción mundial de raíces y tubérculos, que constituyen el segundo grupo más importante de alimentos básicos después de los cereales, disminuirá en 1997/98 a 157,8 millones de toneladas (en equivalente de cereales), es decir, el 1,1 por ciento menos que el año anterior. La reducción se debe principalmente al descenso de la producción de yuca, papas y batatas. La producción mundial de otras raíces y tubérculos, como ñame, taro y raíces y tubérculos de menor importancia, se mantendrá prácticamente inalterada con respecto al año pasado. Es probable que el descenso general de la producción de raíces y tubérculos en 1998 se produzca principalmente en los países en desarrollo, sobre todo en los de bajos ingresos y con déficit de alimentos (PBIDA) que representan el 58 por ciento de la producción mundial. Como consecuencia de la reducción de los suministros de raíces y tubérculos, se prevé que en 1998 descenderá el consumo de alimentos, en particular en los PBIDA. Se prevé asimismo que el volumen del comercio mundial será en 1998 inferior al del año pasado, a causa de la disminución de los suministros.

23. La producción mundial de yuca, que es el cultivo radicoso más importante en los países en desarrollo, se estima que disminuirá en 1998 en casi un 4 por ciento, reduciéndose a 160 millones de toneladas en equivalente de raíces frescas, lo que se deberá en parte a las pautas meteorológicas creadas por el fenómeno El Niño en los principales países productores de tres continentes. En la mayoría de las zonas del Africa oriental es probable que las lluvias excepcionalmente intensas y problemas continuos de brotes de la chinche y el mosaico vírico de la yuca reduzcan la producción. En la mayoría de los países de América Latina y el Caribe, la persistencia del tiempo seco a fines de 1997 y en los primeros meses de 1998 podría poner en peligro las siembras de las cosechas de la primera campaña de 1998. Igualmente, se estima que ha disminuido la producción total de Asia debido a que son menores las cosechas de China, India, Indonesia, Tailandia y Viet Nam. En general, la mayor escasez de suministros de yuca y sus productos derivados podría ejercer una presión al alza de los precios internacionales y hacer que disminuyan las exportaciones durante 1998. Se prevé que disminuirá la producción de papas y batatas en 1998 debido a la reducción de las siembras en la CE y de los rendimientos a causa de la sequía en muchos países de América Latina, el Caribe y Asia.

Aceites y grasas

24. Según los pronósticos, la producción mundial de los siete principales cultivos oleaginosos [ Soja, semilla de algodón, maní, semilla de girasol, colza, almendra de palma y copra.] alcanzará el nivel récord de casi 283 millones de toneladas en 1997/98. El incremento del 8 por ciento previsto en la producción se debería principalmente al aumento de las cosechas de soja de Argentina, Brasil y Estados Unidos. Por ello, se pronostica que la producción mundial de aceites y grasas [ Se incluyen todos los principales aceites y grasas comestibles, independientemente de si se utilizan para consumo humano o fines industriales.] en este período será superior a la de la pasada campaña en un 4-5 por ciento, superando los 102 millones de toneladas. No obstante, el crecimiento de la producción de aceite de palma y aceites laúricos será inferior a la media debido a los efectos del fenómeno El Niño en Asia.

25. Se prevé que aumentará el consumo total de aceites y grasas, superando posiblemente los 101 millones de toneladas en 1997/98. Los principales factores que apoyan la demanda son el crecimiento de los ingresos y la población mundial. No es probable que la crisis económica que afecta a varios países de Asia haga disminuir el nivel de su consumo de aceites en medida considerable, dado que los aceites y grasas son productos alimenticios básicos. Con respecto a la composición del consumo mundial, es probable que aumente la proporción correspondiente a los aceites de soja, colza y girasol, ya que disminuirán los suministros mundiales de aceite de palma y aceites laúricos. Las existencias de aceites y grasas al final de la campaña se recuperarán probablemente con respecto a los niveles inferiores a la media registrados en los últimos años.

26. Se calcula que las exportaciones mundiales de aceites y grasas superan los 35 millones de toneladas, lo que representa un 3 por ciento más que en la pasada campaña. Argentina, Brasil y Estados Unidos serán los principales exportadores de soja, de semilla de girasol y sus aceites; Indonesia [ A mediados de abril, no se había adoptado ninguna decisión definitiva con respecto a la prohibición de las exportaciones de aceite de palma del país, introducida a comienzos de 1998, en lo relativo a su mantenimiento, eliminación o conversión en un plan de impuestos a la exportación.] y Malasia, de aceites de palma y palmiste; Filipinas, de aceites de copra y coco; y Canadá, de colza y su aceite. Las proporciones correspondientes a los aceites de soja y palma en los envíos totales de grasas y aceites se estiman en el 32 y 28 por ciento respectivamente, lo que fundamentalmente constituye una inversión de lo ocurrido en la pasada campaña. Se prevé que aumentarán mucho las importaciones de aceites y grasas en China. Este país se ha convertido de exportador neto en 1993/94 en uno de los mayores importadores de productos de semillas oleaginosas. Aumentarán también probablemente las compras de aceites y grasas que realicen otros importantes países importadores, como los de la CEI, India, Japón, México, Pakistán y la República de Corea.

Carne

27. Según los pronósticos, los suministros mundiales de carne aumentarán en 1998, especialmente los de carnes de aves de corral y cerdo. Aunque la mayor parte del crecimiento se producirá en los países en desarrollo, es probable que el ritmo de expansión se reduzca considerablemente este año, debido principalmente a la situación de China, donde el exceso de suministros de carne ha provocado recientemente una gran reducción de los precios al productor. La crisis financiera padecida en varios países de Asia ha contribuido al descenso de la demanda y a la subida de los costos de los piensos. Esto ha fomentado un nivel de sacrificios de ganado superior al normal, incrementándose así temporalmente los suministros de carne, especialmente bovina y porcina. No se prevé una gran expansión de su producción en los países desarrollados, ya que los notables incrementos de América del Norte quedarían contrarrestados con una contracción ulterior en los países de la CEI. Se pronostica que el comercio de productos cárnicos aumentará el 4-5 por ciento este año, impulsado por la afluencia de mayores suministros de carnes de aves y cerdo. Es probable que vuelvan a aumentar mucho las compras de los países de la CEI, para compensar el descenso de su producción y satisfacer la creciente demanda. En cambio, las devaluaciones monetarias registradas en los principales mercados importadores del Lejano Oriente harán que disminuyan las importaciones de carne bovina, y los suministros se desviarán probablemente, a precios mundiales más bajos, a otros mercados como los de la CEI, el Cercano Oriente y América del Norte. En general, la abundancia de suministros de carne en los países exportadores en relación con la demanda de importación provocará un descenso de los precios internacionales en 1998.

Productos lácteos

28. Se espera que la producción mundial de leche aumente el 2 por ciento en 1998, confirmando una fase de expansión tras varios años de estancamiento. Entre los principales productores mundiales de leche, se prevé un aumento en Argentina, Australia, Brasil, India, Nueva Zelandia, Polonia y Estados Unidos. En la CE, los contingentes lecheros limitan cualquier incremento de la producción, mientras que se prevé que ésta disminuirá en la Federación de Rusia. En muchos países, especialmente en los países en desarrollo, el aumento de la producción lechera está vinculado al crecimiento de la demanda interna; en otros, sobre todo Argentina, Australia y Nueva Zelandia, se destinará a la elaboración en productos lácteos para su venta en el mercado internacional. Al mismo tiempo, algunos exportadores que subvencionan las exportaciones de productos lácteos, como la CEI y Estados Unidos, tendrán que cumplir las limitaciones a tales ventas previstas en el Acuerdo de la Ronda Uruguay. En cuanto a la demanda, se prevé que varios países de Asia reducirán sus importaciones de productos lácteos en 1998, como consecuencia de la drástica devaluación de sus monedas con respecto al dólar estadounidense.

B. EXAMEN DE LOS INDICADORES DE LA SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL

29. Para medir la situación de la seguridad alimentaria mundial, el Comité suele examinar una serie de indicadores que, aunque se limitan a los cereales, se considera que en conjunto arrojan alguna luz sobre la situación alimentaria mundial, actual y futura, debido a la importancia de los cereales en la alimentación en todo el mundo. En el Cuadro 4 se indican siete indicadores de la seguridad alimentaria individual. Se analizan a continuación los cambios en estos indicadores en 1997/98 en comparación con el año anterior, así como las repercusiones de ello.

30. El primer indicador es la relación entre las existencias y la utilización de cereales a nivel mundial. La Secretaría de la FAO considera el nivel del 17-18 por ciento como el mínimo necesario para salvaguardar la seguridad alimentaria mundial, nivel consistente en un 12 por ciento en existencias funcionales y, en un 5-6 por ciento, en existencias de reserva. La relación entre los remanentes mundiales en 1997/98 y la utilización tendencial en 1998/99 aumentará al 15,9 por ciento, según los pronósticos. Pese a que la relación entre las existencias y la utilización es relativamente baja en comparación con el pasado, los precios mundiales en el mercado de los cereales sufren una presión a la baja debido a la debilidad de la demanda mundial y a que son suficientes los suministros en 1997/98.

31. El segundo indicador mide la capacidad de los cinco principales exportadores de trigo y cereales secundarios para satisfacer la demanda de importación. Relaciona la suma de su producción, importaciones y existencias iniciales con la suma de la utilización interna más las exportaciones. Se prevé que esta relación mejorará algo en 1997/98 gracias a las grandes cosechas de Estados Unidos.

32. El tercer indicador relaciona el nivel de las existencias de cierre de cereales mantenidas por los principales exportadores de trigo, cereales secundarios y arroz, con la desaparición total (consumo interno más exportaciones) durante la temporada de mercadeo. Teniendo en cuenta los pronósticos actuales, este indicador refleja una mejora en la situación alimentaria mundial en 1997/98 en comparación con el año anterior. Sin embargo, las cifras siguen siendo inferiores a los promedios de años anteriores y el incremento de este indicador de la seguridad alimentaria mundial puede atribuirse principalmente a mejoras en los suministros de los principales exportadores de trigo.

33. Las variaciones en la producción anual de cereales de los principales importadores de estos productos (la CEI, China e India) han solido tener una notable influencia en las dimensiones del comercio mundial de cereales. Sin embargo, en los últimos años, de estos países sólo China ha seguido importando grandes cantidades de cereales en el mercado mundial. El cuarto indicador, que mide los cambios en la producción de cereales en este grupo de principales consumidores, frente a la tendencia y al año precedente, registra un crecimiento, si bien inferior, relativamente bueno en 1997/98. Mientras en la CEI aumentó considerablemente la producción de cereales en la CEI, en China e India la producción de cereales secundarios fue menor que en la campaña precedente.

34. Los cambios en la producción total de cereales de los PBIDA, que muestra el quinto indicador, constituyen otra forma de medir la seguridad alimentaria. Sin embargo, como la producción de China e India determina en gran medida la del total de los PBIDA, el sexto indicador no incluye a esos dos países. De hecho, los demás PBIDA representan una proporción notable de los países más vulnerables del mundo.

35. Ambos indicadores mostraron un descenso que se debe a la reducción de la producción de cereales en China, como se ha indicado ya, a los perjuicios causados por la sequía en las cosechas de Africa del Norte y a la disminución debida al mal tiempo en la producción del Africa Austral. Hay que señalar, no obstante, que el descenso de la producción en varios de estos países se mide en relación con las cosechas récord o muy grandes obtenidas en la pasada campaña.

36. El séptimo indicador compara los precios de exportación de los principales cereales. Persistió la tendencia a la baja de los precios de los cereales al preverse que los suministros mundiales serían superiores a la utilización en 1997/98, incluso teniendo en cuenta una pequeña acumulación de existencias remanentes. Por ello, es de prever que los países importadores de cereales pagarán en general menos por sus compras en 1997/98 que en la campaña anterior. De hecho, se espera que la factura de las importaciones de cereales de los países en desarrollo disminuya un 6 por ciento en 1997/98 reduciéndose a 26 500 millones de dólares, mientras que no cambiará la de los PBIDA, manteniéndose en 12 500 millones de dólares, tras el descenso del 26 por ciento registrado el año anterior. Sin embargo, los países menos adelantados y los países en desarrollo importadores netos de alimentos, a los que se refiere la Decisión Ministerial de la Ronda Uruguay, pagarán probablemente en 1997/98 una factura de importación de cereales un 1,2 por ciento mayor, es decir, 7 200 dólares EE.UU., debido a que el volumen total de sus importaciones habrá aumentado un 14 por ciento.

37. En general, los siete indicadores confirman una mejora general de la situación del suministro de cereales en 1997/98 en comparación con el año anterior. Sin embargo, los problemas meteorológicos ya señalados y el nivel relativamente bajo de las existencias hacen que las perspectivas de la seguridad alimentaria mundial se mantengan en un equilibrio delicado. Causan cierta preocupación los precios bajos y, en algunos casos, en descenso de los cereales, lo cual podría contribuir a que los productores no tengan incentivos para incrementar las siembras en 1998. Parece que esto ha ocurrido ya en Canadá y Estados Unidos, donde se han dedicado al trigo de invierno y primavera superficies menores que el año pasado.

Emergencias y ayuda alimentaria

38. Aunque se estima que la producción de cereales de los países en desarrollo en 1997 ha sido sólo ligeramente inferior a los buenos niveles del año pasado, el número de países que se enfrentan con emergencias alimentarias ha aumentado a 37, frente a 31 al final de 1997, debido principalmente a los efectos del fenómeno El Niño.

39. En Africa, no se han materializado por el momento las preocupaciones que se tenían con respecto a una grave sequía en el Africa Austral como consecuencia de El Niño, pero han surgido problemas en otras partes del continente: en el Cuerno de Africa, graves anomalías meteorológicas han provocado intensas lluvias impropias de la estación e inundaciones; la alternancia de sequías e inundaciones ha causado dificultades en el suministro alimentario en la mayor parte del Africa oriental; los efectos acumulados de la persistente inseguridad, la escasez de insumos y el mal tiempo han sido graves en la región de los Grandes Lagos; y en el Africa occidental, las cosechas han sido menores a causa de períodos de sequía padecidos a mediados de la campaña de 1997.

40. En Asia, la situación alimentaria se hizo desesperada en la República Democrática Popular de Corea en 1997, debido a la grave sequía y a un tifón que se padecieron tras dos años sucesivos de inundaciones. Persisten los problemas del suministro alimentario en Mongolia e Iraq, pese a que en este último país se ha aliviado algo la situación gracias a la aplicación del programa de petróleo por alimentos, pero la malnutrición sigue representando un grave problema. En otros lugares de Asia, sequías provocadas por El Niño han afectado a la producción de cereales, en China, Indonesia, Filipinas y Tailandia, así como en Papua Nueva Guinea, en el arco del Pacífico. Además, hay cada vez más pruebas de que la recesión económica del Asia sudoriental está influyendo negativamente en la seguridad alimentaria de los grupos vulnerables.

41. En partes de América Latina, las perturbaciones meteorológicas provocadas por El Niño han tenido hasta ahora amplias repercusiones en la producción agrícola y seguridad alimentaria nacionales. En América Central, se registran graves problemas alimentarios en El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá, donde períodos de sequía provocados por El Niño perjudicaron gravemente a las cosechas de cereales de la primera campaña, mientras que en el Caribe, el mal tiempo causó problemas alimentarios en la República Dominicana y Haití.

42. En la CEI, sigue siendo necesario suministrar ayuda alimentaria específicamente a poblaciones vulnerables, tales como desplazados dentro del país, y refugiados y ancianos, en Armenia, Azerbaiyán, Georgia y sobre todo Tayikistán.

43. El total de la ayuda alimentaria suministrada para programas, proyectos y situaciones de urgencia en 1996/97 (1º de julio al 30 de junio inclusive) calculada en cereales, disminuyó por cuarto año consecutivo reduciéndose a 4,9 millones de toneladas, un 37 por ciento menos que el año anterior. Las estimaciones del total de los envíos en 1996/97 en virtud del Convenio sobre la Ayuda Alimentaria, incluyendo legumbres y productos derivados, fue algo superior al mínimo acordado en 1995 de 5,35 millones de toneladas (en equivalente de trigo) [ Los "granos", en los términos del Convenio sobre la Ayuda Alimentaria, incluyen trigo, cebada, maíz, mijo, avena, centeno, sorgo, arroz, productos derivados y también legumbres. Los miembros del Convenio pueden suministrar también el equivalente en dinero de sus contribuciones mínimas anuales. Los miembros son Argentina, Australia, Canadá, la Comunidad Europea y sus miembros, Japón, Suiza y Estados Unidos.] . Este total de envíos de ayuda alimentaria es el menor desde que comenzaron los programas de ayuda alimentaria a mediados de los años cincuenta, es inferior en 10 millones de toneladas al nivel alcanzado en 1992/93 y representan menos de la mitad del objetivo establecido por la Conferencia Mundial de la Alimentación en 1974. La reducción del volumen de la ayuda alimentaria en 1996/97 se debió a la disminución de los envíos a todas las regiones y al grupo de los PBIDA. El total de los envíos de cereales a los PBIDA disminuyó a unos 4 millones de toneladas, 2,6 millones o el 39 por ciento menos que el año anterior. Con este nivel, la proporción de los envíos de cereales a los PBIDA bajó al 6 por ciento. Teniendo en cuenta las emergencias alimentarias que se han descrito, el total de los envíos de ayuda alimentaria en cereales podría aumentar en 1997/98. De hecho, la ayuda alimentaria a los PBIDA que se ha asignado, comprometido o enviado en lo que va de 1997/98 es superior a la del año pasado.

C. ESTADO DE LA DECISION MINISTERIAL DE MARRACKECH

44. El Comité de Agricultura de la OMC, que se encarga de seguir los progresos en el cumplimiento de los compromisos con arreglo al Acuerdo sobre la Agricultura, en su reunión de noviembre de 1997, examinó la aplicación de la Decisión sobre las medidas relativas a los posibles efectos negativos del programa de reforma en los países menos adelantados y los países en desarrollo importadores netos de alimentos y, en su reunión de marzo de 1998, examinó la lista de países que pueden ser elegidos. Varios donantes presentaron notificaciones sobre sus programas de asistencia para el desarrollo a los países menos adelantados y países en desarrollo importadores netos de alimentos, incluidos los envíos de ayuda alimentaria. El Convenio sobre la Ayuda Alimentaria, que actualmente se halla sometido a examen por el Comité de Ayuda Alimentaria del Consejo Internacional sobre los Cereales, fue prorrogado por un año, hasta junio de 1999, en la reunión de dicho Comité de diciembre de 1997. Los donantes están estudiando varias propuestas para mejorar el sistema de ayuda alimentaria, incluyendo los medios de responder a las necesidades de los países menos adelantados y países en desarrollo importadores netos de alimentos, con arreglo a la citada Decisión. No se han logrado muchos progresos concretos con respecto a otros componentes de las posibles medidas que habrían de adoptarse en el ámbito de la Decisión.

D. EVOLUCION DE LAS POLITICAS CEREALISTAS

45. Tanto los países desarrollados como en desarrollo, han proseguido las reformas emprendidas en años anteriores, si bien la subida de los precios internacionales de los cereales durante 1995/96, así como la estrechez de los presupuestos financieros pueden haber frenado el ritmo de la reforma en muchos países. En muchos países se elevaron los precios de sostenimiento de los cereales para compensar los costos elevados de los insumos y los efectos de la sequía en algunos casos. Continuaron las reformas, centradas en la reducción de las subvenciones al consumidor y al productor, así como de los obstáculos al comercio, como parte del cumplimiento de los compromisos contraídos en virtud del Acuerdo de la Ronda Uruguay y de importantes leyes aplicadas, como la Ley Federal de Mejora y Reforma Agrícola (FAIR) en los Estados Unidos. En los países donde predominaba la comercialización estatal, se privatizaron algunas instituciones paraestatales y se modificaron las funciones de las juntas estatales de comercialización.

IV. PUNTOS PARA EL EXAMEN DEL COMITE

46. Este documento ha presentado una serie preliminar de indicadores para contribuir al seguimiento del estado de la seguridad alimentaria de las personas y en los hogares, que muestran la diversidad de las condiciones relacionadas con la predominancia de la desnutrición a nivel nacional. En la primera parte de los años noventa, la disponibilidad de alimentos per cápita aumentó en la mayoría de los países en desarrollo, pero disminuyó en otros muchos. Se está investigando ulteriormente sobre una serie más amplia de indicadores.

47. En 1997/98, el suministro alimentario mundial mejoró y fueron también satisfactorios la mayoría de los indicadores de la situación de la seguridad alimentaria a nivel mundial; sin embargo, la producción de cereales disminuyó en los PBIDA en cuanto grupo. En algunos países se padecieron las consecuencias del fenómeno El Niño y de la crisis financiera de Asia. El número de países enfrentados a situaciones de emergencia alimentaria aumentó y podría registrarse una inversión de la tendencia al descenso de la ayuda alimentaria. Continuó, si bien a ritmo más lento, la aplicación de las políticas de reforma en cumplimiento del Acuerdo de la Ronda Uruguay.

48. El Comité podría recomendar que se siguieran investigando las relaciones causales asociadas a la inseguridad alimentaria (incluidos los efectos a largo plazo de El Niño y de la crisis financiera) y las repercusiones de dichas relaciones en lo que respecta a políticas encaminadas a lograr los objetivos de la Cumbre Mundial sobre la Alimentación.

Cuadro 1 - Seguridad alimentaria en los hogares: Indicadores del estado

 

 



Agrupaciones de países

Población desnutrida

Contexto socioeconómico

Economía alimentaria

(Base Cumbre Mundial sobre la Alimentación)

1992

1990-92

1992

1995

1995

1995

1993-95

1993-95

1993-95 / 1990-92  

Población total

Proporción de desnutridos

Población desnutrida

PNB per cápita

parte de la población rural

parte de la agr.

Importaciones netas de alimentos

disponibilidad de alimentos per cápita

cambio en la disponibilidad de alimentos per cápita

 

 

 

 

 

en el PNB

 

 

 

(millones)

(%)

(millones)

($EE.UU.)

(%)

(%)

(cal.per cáp al día)

(cal. per cáp al día)

 

total clase

promedio clase

total clase

gama clases

gama clases

gama clases

promedio clases

promedio clases

índice

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Clase 1 : Más del 50% desnutridos

124

65

82

100-340

61-87

33-56

239

1711

1.02

Clase 2: 40-50% desnutridos

126

44

56

180-800

42-87

15-42

314

2145

1.06

Clase 3: 30-40% desnutridos

400

36

142

120-1460

40-82

10-50

158

2205

1.00

Clase 4: 20-30% desnutridos

1216

22

269

240-3490

14-79

5-51

-5

2381

1.02

Clase 5: 10-20% desnutridos

1631

15

253

620-7040

21-73

0-26

172

2689

1.02

Clase 6: Menos del 10% desnutridos

606

6

38

1120-17400

10-47

6-20

464

3031

1.00

N.B.
(i) El PNB per cápita, la parte de la población rural y la parte de la agr.en el PNB son datos del Banco Mundial.
(ii) En la columna "importaciones netas de alimentos", las cifras negativas indican exportaciones netas de alimentos

Número de países en cada claseClase 1: 11 (9 Africa; 1 Asia y Pacífico; 1 América Latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 2: 10 (8 Africa; 0 Asia y Pacífico; 2 América latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 3: 16 (13 Africa; 2 Asia y Pacífico; 1 América Latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 4: 25 (7 Africa; 8 Asia y Pacífico; 8 América Latina y Caribe; 2 Cercano oriente y Africa del Norte)
Clase 5: 17 (2 Africa; 5 Asia y Pacífico; 7 América Latina y Caribe; 3 Cercano oriente y Africa del Norte)
Clase 6: 19 (0 Africa; 4 Asia y Pacífico; 5 América Latina y Caribe; 10 Cercano Oriente y Africa del Norte)

 

Cuadro 2 - Seguridad alimentaria en el hogar: Indicadores tendenciales

 

Agrupaciones de países

Contexto socioeconómico

Economía alimentaria

1985-95

1985-95

1985-95

1985-96

crecimiento PNB
per cápita

superávit neto
del comercio agrícola

crecimiento de la
producción
de alimentos básicos

inflación de los precios
de los alimentos

(nº de países)

(nº de países)

(nº de países)

(nº de países)

+

0

-

+

0

-

+

0

-

+

0

-

Clase 1 : Más del 50% desnutridos

0

7

2

1

5

3

9

0

2

1

5

0

Clase 2: 40-50% desnutridos

3

5

2

2

3

3

6

1

3

0

7

1

Clase 3: 30-40% desnutridos

5

5

6

3

10

3

14

0

2

0

1

0

Clase 4: 20-30% desnutridos

10

7

4

3

9

8

19

0

6

0

18

0

Clase 5: 10-20% desnutridos

13

1

2

4

6

7

11

1

5

1

13

0

Clase 6: Menos del 10% desnutridos

9

1

5

4

4

10

3

3

3

0

10

1

Clave: + positivo 0 insignificante - negativo

Número de países en cada clase
Clase 1: 11 (9 Africa; 1 Asia y Pacífico; 1 América Latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 2: 10 (8 Africa; 0 Asia y Pacífico; 2 América latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 3: 16 (13 Africa; 2 Asia y Pacífico; 1 América Latina y Caribe; 0 Cercano Oriente y Africa del Norte)
Clase 4: 25 (7 Africa; 8 Asia y Pacífico; 8 América Latina y Caribe; 2 Cercano oriente y Africa del Norte)
Clase 5: 17 (2 Africa; 5 Asia y Pacífico; 7 América Latina y Caribe; 3 Cercano oriente y Africa del Norte)
Clase 6: 19 (0 Africa; 4 Asia y Pacífico; 5 América Latina y Caribe; 10 Cercano Oriente y Africa del Norte)

 

Cuadro 3 - Alimentos: Producción, Utilización, Comercio y Variaciones en las Existencias Mundiales

 

 

 

 

 

U T I L I Z A C I O N

 

 

 

 

 

 

 

 

 

PRODUCCION

 

TOTAL

 

ALIMENTOS

 

COMERCIO 1/

 

CAMBIOS EN EXISTENCIAS FINALES

 

1995/96

1996/97

1997/98

 

1995/96

1996/97

1997/98

 

1995/96

1996/97

1997/98

 

1995/96

1996/97

1997/98

 

1995/96

1996/97

1997/98

 

 

 

pron.

 

 

 

pron.

 

 

 

pron.

 

 

 

pron.

 

 

 

pron.

 

( . . . millones de toneladas . . . .)

POR PRODUCTOS

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Alimentos básicos 2/

1891.6

2051.4

2065.4

 

1956.9

2016.2

2047.0

 

1006.8

1024.1

1036.3

 

214.5

208.7

210.1

 

 

 

 

Total cereales 3/

1729.8

1891.8

1907.6

 

1795.1

1856.6

1889.2

 

918.3

936.5

949.8

 

206.0

200.3

201.8

 

-58.7

29.6

4.4

Trigo

547.6

590.3

612.9

 

563.3

578.0

598.6

 

396.9

402.0

412.1

 

92.9

93.6

92.5

 

-13.5

8.5

13.1

Arroz (elaborado)

372.0

382.5

383.7

 

372.9

381.0

384.2

 

333.1

341.0

345.5

 

19.5

18.4

21.6

 

-0.6

2.4

-2.7

Cereales secundarios

810.2

919.0

911.0

 

858.9

897.6

906.4

 

188.3

193.5

192.2

 

93.6

88.3

87.7

 

-44.6

18.7

-6.0

Raíces y tubérculos4/

161.8

159.6

157.8

 

161.8

159.6

157.8

 

88.5

87.6

86.5

 

8.5

8.4

8.3

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Carne 5/

217.0

223.4

230.1

 

217.0

223.2

230.0

 

217.0

223.2

230.0

 

13.5

14.0

14.6

 

 

 

 

Aceites y grasas 6/

95.7

97.3

101.8

 

96.8

98.4

101.3

 

 

 

 

 

31.7

34.2

35.4

 

-0.2

-0.7

1.5

Leche 7/

537.0

539.0

545.0

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ALIMENTOS BASICOS POR GRUPOS DE PAISES

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Países desarrollados

820.5

917.7

951.9

 

764.2

791.6

816.0

 

185.6

185.4

187.0

 

56.8

57.4

52.6

 

-16.3

-50.1

27.7

Países en desarrollo

1071.1

1133.7

1113.5

 

1192.7

1224.6

1231.0

 

821.2

838.7

849.3

 

157.7

151.3

157.5

 

-42.4

79.7

-23.3

PBIDA

842.8

896.7

876.2

 

907.7

934.9

940.0

 

671.3

685.6

693.6

 

80.3

66.3

72.5

 

-0.3

11.5

-12.3

PBIDA< 8/

359.8

377.8

363.0

 

407.9

413.8

413.1

 

298.7

302.5

305.3

 

54.9

52.8

61.3

 

3.1

17.3

-20.3

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente: FAO

Totales calculados a partir de datos sin rredondear.

1/ Importaciones para los cereales; exportaciones para raíces y tubérculos, carne y aceite
2/ Incluir cereales y tubérculos.
3/ Producción de arroz convertida de descascarado a elaborado.
4/ En equivalente de cereales. Datos correspondientes al año civil y se refieren al segundo año indicado.
5/ Los datos corresponden al año civil y se refieren al segundo año indicado.
6
/ Se define el comercio como la suma del comercio de aceites y el equivalente en aceites del comercio de semillas oleaginosas.
7/ Los datos corresponden al año civil y se refieren al segundo año indicado.

8/ Con exclusión de India y China  

 

 

Cuadro 4 - CAMBIOS EN LOS INDICADORES DE SEGURIDAD ALIMENTARIA MUNDIAL

 

Promedio

1995/96

1996/97

1997/98

 

1990/91-1994/95

 

 

 

1. Relación de las existencias mundiales de cereales a las tendencias del consumo mundial de cereales

 

 

 

 

 

19.7

14.1

15.4

15.9

2. Relación de los suninistros de los cinco principales exportadores de cereales 2/

 

 

 

 

A las necesidades

1.18

1.10

1.12

1.14

3. Existencias finales en porcentaje de la desaparición total en los principales exportadores de cereales

 

 

 

 

   Trigo 2/

23.3

13.9

15.6

17.9

   Cereales secundarios 2/

18.2

8.2

12.0

14.7

   Arroz 3/

12.2

8.3

9.4

9.2

   Total

17.9

10.1

12.3

14.0

 

Tasa anual de crecimiento tendencial

Cambio porcentual respecto del año anterior

 

1987-1996

1995

1996

1997 1/

4. Cambios en la producción de cereales en la

1.42

1.24

4.69

2.99

CIS, China e India

 

 

 

 

5. Cambios en la producción de cereales de los PBIDA

3.22

3.45

6.80

-2.14

6. Cambios en la producción de cereales de los
PBIDA, excluidas China e India

3.82

1.81

8.82

-5.54

 

 

Cambio porcentual respecto del año pasado

 

 

1995/96

1996/97

1997/98 5/

7. Variaciones de los precios de exportación 4/

Trigo

37.2

-16.3

-20.2

(Promedios anuales)

Arroze

44.1

-12.7

-8.5

 

Maíze

52.3

-15.0

-19.1

Fuente: FAO

1/ Pronóstico
2/ Argentina, Australia, Canadá, CE y Estados Unidos.
3/ China, Pakistán, Tailandia, Estados Unidos y Viet Nam.
4/ Trigo: duro invierno nº 2 Estados Unidos; maíz: amarillo nº 2 Estados Unidos; arroz: quebrado thai (A1 Super) ..
5/ Para los precios del trigo y maíz en 1997/98, se dan sólo los promedios de nueve meses (julio/marzo). Se calculan los cambios comparando los siete primeros meses de la campaña con el período correspondiente de 1996/97. Los precios del arroz se basan en promedios del año civil del primero de los años indicados.